Karamelo

Esta variedad se ha estado preparando desde hace mucho tiempo. Se trata de una mezcla de las variedades más índicas. La meta era buscar no tanto una variedad de floración rápida, sino aprovechar el vigor híbrido de este cóctel molotov de índicas. Esta planta reúne las mejores características de las variedades del catálogo de Kannabia: rápida, productiva y de fácil cultivo. Karamelo es una planta que desarrolla todo su potencial en exterior, pues aunque pase de los 2 metros de puro cogollo, podrás recogerla a mediados-finales de Septiembre. Los cogollos son densos y esponjosos, pero quedan duros como rocas en las últimas semanas de su ciclo vital. Las flores desprenden un penetrante y dulce olor desde las primeras semanas de floración.
No es conveniente saturar las raíces de Karamelo con un exceso de fertilizante, pues el crecimiento de la planta es constante. Para un crecimiento controlado en interior, dejar crecer las plantas durante no menos de 15 días desde el germinado (bajo foto-período de 18 horas y con una EC, en crecimiento, nunca superior a 1,4. En sistemas hidropónicos puedes alcanzar EC de 1,6).
La estructura es típica de las variedades índicas: gran cogollo central y gran cantidad de ramas laterales, ideal para su cultivo en interior. La distancia entre los nodos es corta y tiene una buena relación cáliz-hoja, produciendo compactas flores fáciles de manicurar. Soporta bien la altas temperaturas y largos períodos de sequía. Es muy resistente a plagas de insectos y a los ataques de hongos.
Una de las cualidades más destacadas de esta variedad es la rapidez en la maduración. En pocos días puedes ver cómo se tornan los tricomas de transparente a lechoso, y también con mucha rapidez se torna en tono café con leche. Signo de que está completamente madura.
El sabor es muy dulce y deja un regusto acaramelado, como las golosinas.
La psicoactividad de esta variedad es bastante elevada y los niveles de y CBD son también altos. Lo suficiente para inducir a estados relajantes y antidepresivos. Lo que le otorga propiedades medicinales para algunos cultivadores.
Se trata de una variedad que produce un buen hash, aunque el ice-o-lator de Karamelo es un dulce demasiado tentador.